lunes, 21 de septiembre de 2015

¡¡España es de oro!! Héroes de Europa.-

Hace 6 años, ningún español había podido celebrar jamás un Eurobasket. Una buena actuación ya era un orgullo. Una medalla, una fiesta. Después de conquistar el mundo en 2006 y del "Holdenazo" en casa de 2007 -cómo dolió aquel partido-, ganar parecía posible, soñar parecía obligado. En el Eurobasket de 2009 se vivieron los mismos instantes de tensión que en este campeonato. Derrotas que dolían, dudas que acechaban, críticas que hacían daño. Hasta el partido de Lituania. Hasta un 23-0 de parcial, cuando más llovía, que cambió para siempre el partido, que cambió para siempre aquel torneo y que cambió para siempre la historia de España. Llegó el oro. Llegó otro. Y este 20 de septiembre de 2015, como solo pudo hacer la mejor mejor Yugoslavia, cayó un tercero inmensamente dorado, como el juego de un equipo que creció de principio a fin de la mano de su líder, acabando lanzado un campeonato que, si dura una semana más, termina convirtiendo en Dream Team al equipo de las dudas.

Ni tres minutos sin anotar ni solo dos puntos hasta el ecuador del periodo. Nada iba a cambiar la historia del partido. Pau, que lo mismo asistía a Claver -cuánta rabia en ese mate, Víctor- o anotaba sin inmutarse desde la personal cual tirador lituano (64-49, m.35), no lo iba a permitir. Lituania, allá donde el baloncesto es religión, lo intentó por última vez pero en ese momento Llull le dio el golpe de gracia con un triple (69-54, m.36) que se oyó en las calles, que retumbó en cada casa, como tres días antes aquel mate violento de Gasol contra Francia. El murmullo se convirtió en grito. El rumor en realidad. España era campeona.

Foto FEB


De ahí al 80-63 final, otra ración de momentos. Llull anotando un triple a tabla y abrazándose con San EmeterioReyes, el español más laureado junto al mitoT, yéndose al banquillo como un héroe, chocándole la mano a su técnico, brillante en el campeonato, esencial en el éxito logrado. Rodríguez sonriente, consciente de que conseguía el oro que le faltaba, además de ser declarado mejor base del campeonato. Y Gasol... bueno, Gasol anotando, a falta de un minuto y medio, su último triple de su campeonato más redondo y poniendo en pie a todos cuando Scariolo le sustituyó. De pie Lille, de pie Francia, de pie Lituania, de pie España, claro, de pie Europa y de pie un mundo del baloncesto que volvió a cambiar durante estas dos semanas con algo tan sencillo y tan difícil al mismo tiempo como enamorar con una pelota naranja.



Fuente: Acb.com

No hay comentarios: